Me encanta el cine y siempre que puedo aprovecho para ir. EL otro día vi una película en el cine con mi familia, Begin Again, de John Carney. No sé si la habéis visto. . .aunque no voy a hacer una crítica cinematográfica, lo que me gustaría es transmitiros la moraleja que saqué de ella, o al menos el mensaje que me llegó.
Es cierto que cada uno saca sus propias conclusiones dependiendo de lo que uno quiera ver. Eso es así, estamos condicionados por nuestras mochilas, nuestro subconsciente y los patrones mentales que rigen nuestro comportamiento.
Pero vamos al lío. En la película, un productor musical en “horas bajas” ayuda a una chica que compone canciones, desengañada personal y profesionalmente, a “producir” un disco, un sueño hecho realidad. . .
Ya sé que es una película y creerás que en la vida real esto no ocurre, pero la verdad es que hay muchas sincronicidades que sí puedes relacionarlas con tu vida. Así que te cuento lo que yo me llevé:
EL LIMITE LO PONES TU.
Cuando las cosas no van como deseamos o incluso van mal, muy mal, fatal. . .creemos que no pueden ir a peor. . .el problema es que el punto de inflexión para actuar viene dado en el momento en que hemos decidido que ya es suficiente, que no nos da la gana de seguir como estamos y hacemos algo al respecto. Siempre puedes”aguantar” más, la pregunta es: ¿Estas dispuesta a hacerlo? ¿Qué te aporta?
El límite lo pones tú.
CUANDO HACES ALGO QUE TE ENCANTA HACER Y ADEMÁS SE TE DA GENIAL, BRILLAS.
Cuando haces algo que te gusta y se te da bien, brillas. Y cuando eso ocurre es más probable que encuentres a alguien que se de cuenta de ese resplandor que dedicándote a una actividad que no te gusta en absoluto.
Te dejas llevar, y cada vez lo haces mejor, eso se percibe, se palpa y los demás así lo ven, facilitando que les transmitas lo que sientes y lo que significa para ti.
SUEÑA EN GRANDE Y EMPIEZA COMO PUEDAS
Quieren grabar un disco y no tienen los medios, como tantos y tantos emprendedores que tienen ideas brillantes y nunca verán la luz por no disponer de recursos y no creer que pueden conseguirlos o que pueden hacerlo de otra forma.
Mucha gente se echa atrás cuando piensa en todo lo que conlleva crear un negocio. Ellos piensan en lo que quieren hacer: grabar un disco. No tienen medios, no tienen soporte de ninguna productora, ni mesa de mezcla, ni músicos, ni nada. . .
Pero no piensan en conseguir el dinero para alquilar una sala y proveerse de todo ello, piensan en los recursos de que disponen. Unos micrófonos, unos amigos, una guitarra, bajo, teclado, un ordenador y la ciudad entera para que les sirva de escenario.
Ya sé que es una película, pero no se echan atrás por no disponer de los medios necesarios, ni se bloquean sin hacer nada. Generan opciones, buscan alternativas y las oportunidades surgen. . .es así también el la vida. Si nos aferramos a: “es que no podemos hacer tal cosa porque nos falta esta otra. . .”, claro que nos iría genial, pero hay que hacerlo a pesar de no tener “esta otra”
¿Has visto Begin Again? Clic para tuitear
CUANDO DAS SIN ESPERAR A CAMBIO, EL BOOMERANG VUELVE.
El productor no piensa en lo que va a conseguir si pueden grabar el disco, solo quiere ayudar a alguien que considera tiene talento y ve el potencial que puede llegar a tener, más allá del que pueda ver ella misma.
Cuando ayudas a los demás por el hecho de ayudar y no por lo que vas a obtener a cambio, no solo te sientes genial, sino que te viene todo multiplicado. Cuando nuestra atención se basa en lo que vamos a recibir se cierra un círculo vicioso que no nos deja enfocarnos en el objetivo: ayudar, sino que lo hacemos de cualquier manera esperando nuestra recompensa. Y no hay mejor recompensa que contribuir de algún modo a hacer la vida de los demás más agradable.
No estoy diciendo que tengamos que trabajar solo por amor al arte, tenemos que vivir, pero sí que el foco de nuestra atención no debe ser económico, sino el hacerlo lo mejor que sepamos.
HASTA QUE NO PREGUNTAS, NO SABES LA RESPUESTA
Queremos hacer algo pero nos echamos para atrás pensando que nos van a decir que no, ¿no te ha pasado nunca? A mi solía pasarme, pero hace tiempo que no. Mi abuela me decía: “el no ya lo tienes”. Así que no descartes participar en una charla o colaborar con alguien que crees te va a decir que no, pregunta primero, atrévete, porque el límite lo sigues poniendo tú y es posible que te lleves una grata sorpresa. Eso sí, siendo educada y respetuosa.
LOS AMIGOS DE VERDAD, SIEMPRE ESTÁN AHÍ
Los amigos están para eso, para compartir, para dar apoyo, para desahogarse, para ayudar. . .hay muchos momentos en mi vida en los que he tenido la suerte de contar con personas maravillosas que lejos de solucionarme problemas (eso lo tengo que hacer yo), estaban ahí solo para escuchar, para reír o para llorar. Me encanta compartir con ellos tanto cuando estoy contenta y celebro mis logros como cuando estoy triste y necesito simplemente un “no te preocupes”, estoy segura de que tú también, mímalos.
Sé que es ficción, pero te repito que lo puedes aplicar a tu vida, no ciñéndonos a la historia y como termina, sino como lecciones de vida que podemos extraer de todas las experiencias que vivimos y lo distintas que pueden ser si lo queremos ver de un modo y otro.
Es verdad que las oportunidades ocurren, pasan delante de nuestras narices constantemente solo que a veces no estamos en condiciones de verlas o quizás las vemos y nos da miedo aprovecharlas, que es peor todavía.
Dicen que hay que estar en el lugar preciso en el momento preciso, pero hay que moverse para que eso ocurra, aunque eso ya lo sabes.
¿Has visto la película? ¿Hay alguna buena conclusión que hayas sacado de alguna historia y lo apliques a tu vida? Me encantará que me lo cuentes en los comentarios.
Un abrazo,
Deja una respuesta